Iba a ser el balance de un día, pero termino siendo el del año. Chau 2009

Tengo un problema. Creo que me estoy volviendo Blogger.

En realidad estoy en uno de esos días (si vamos a ser sinceros estoy en una de esas semanas, meses) en los que haces TODO, incluso aquellas cosas que requieren mayor esfuerzo, con tal de no hacer eso puntual que tenés que hacer.

Si vamos a ser sinceros este fue un año de mierda. Realmente lo fue. Empezó con un cumpleaños de 18 frustrado, separación con Matías, romper un corazón.Conocer un rubio infartante(?) Divino, mentiroso, HOMBRE (el desenlace de la historia es obvio). Salir a flote. Empezar la facultad, meter dos de cuatro materias, confundirse el horario de un final. Conocer a un Ángel. Conocer a mi Ulises de la Increible y triste historia de la Candida Eréndira y su abuela desalmada. Llegar a preguntar DEMIÁN, ¿DÓNDE DEJASTE LAS ALAS?
Comenzar a trabajar; ser una trabajadora frustrada. Quedarse sin trabajo por causas ajenas a mi persona. Estar desempleada. Comenzar en el segundo cuatrimestre. Promocionar dos de tres materias (cuatro adentro en el año) y quedarme con cuatro finales más en cola de impresión para un período de una semana (es la semana actual) de los cuales todavía no preparé ninguno. Cabe destacar que el primero de esos cuatro finales es MAÑANA. Quedarse sin ángel de la guarda de la noche a la mañana.Cómo Matías siempre me dijo, y yo también, TODO EN LA VIDA VUELVE. Así que si lastimaste, ahora te toca que te lastimen a vos... La vida es un puto boomerang.
Por si esto fuera poco, abandoné Inglés. Me convencí a mi misma de que no tenía tiempo. Me mentí, dije que iba a rendir First Certificate y así evitar tener que rendir los cuatro niveles de Inglés de la Universidad, pero creo que es bastante evidente que si uno de estos cuatro finales que rindo en esta puta semana es Inglés I, no hace falta aclarar que mis deseos de rendir First se fueron a la mierda.

No me gusta decir malas palabras, no acostumbro. De hecho nunca dije una en voz alta en mi casa. Pero en este momento no estoy hablando con nadie de mi familia y tampoco soy Barbie. Soy Florencia y necesito descargar un poco toda la mierda que este año dejó.

¿Conociste gente nueva? No lo suficiente como para decir "Tengo nuevos amigos"
¿Te enamoraste? Si, mucho. Pero no sirvió de nada.

Esos son los balances que haría una test pedorro de Facebook; éste es un poco mas expresivo y un poco mas sincero, porque no lo lee nadie que no lo tenga que leer. Y sí, no me canso de decir que fue un año de mierda. Dejé Volley. Me dejaron (dos veces), dejé a alguien, le rompí el corazón. Mentí, mas de una vez, seguramente. Estudié, de más, más de una vez. Me decepcionaron, me sentí sola, lloré, sufrí. También salí, me divertí, tome Cindor con Pepitos... Pero como me dijiste hace poco NO SE COMPARA. Y no, no se compara, hoy pesan mucho más las cosas malas de este maldito 2009, que encima no se va, no se va más...

¿El 2010 será también mi año? Espero.
Espero... encontrar trabajo;estudiar portugués; promocionar una mayor cantidad de materias por cuatrimestre; tener un poco más ganas de estudiar... Que deseos de mierda jaja, ninguno lo suficientemente motivante como para que deje de hacer esto y vaya a hacer lo que tengo que hacer.

Necesito una motivación... De hecho, toda mi vida la necesité. Todavía soy como las Sub 14, que para ganar y jugar bien necesitan estar motivadas. Creo que todavía no maduré lo suficiente como para depender solo de mi... ¡Me odio!

La clave está en que tengo que encontrar una motivación propia. Algo que me haga seguir incluso cuando las motivaciones que están por fuera mio se caen. Ese es mi problema actual, tenía motivaciones. Muchas, muchisimas. Pero no eran mias, eran prestadas, y como todo lo que te prestan, en algún momento se devuelve. Ahora lo estoy padeciendo. Intenté apropiarme de algo que no me pertenecía, y lo usé como fuerza impulsora de mi vida. Mirame ahora, sola, sin triciclo prestado, y sin motivaciones. ¿Qué hago? Por el momento, empezar a escribir para conocerme un poco más a mi misma, ser sincera conmigo misma y ver, si por esas casualidades, en algún rinconcito encuentro alguna motivación que dependa solo de mi.

Se acepta ayuda para tratar de encontrarla.